domingo, 8 de agosto de 2010

火 (Tú)

Un día te escribí una carta (estaba mal por mil razones), porque sentía que tenía mil cosas inconclusas, cosas que había querido decirte y no lo había hecho. No esperaba tu respuesta, no tan pronto por lo menos, pero me fue un alivio leer tus palabras. Después de esto creí haberte superado, de hecho me jacté de ello por mucho tiempo, hasta ayer!. No fue sino hasta que te vi otra vez que que todo mi cuerpo se estremeció y mis palabras se atoraron en mi garganta, fué un encuentro infimo pero a la vez tan inexperado que ni te imaginas lo feliz que me puso. Sé que yo para ti hoy no soy nadie, bueno un amigo del pasado, pero no pertenezco a tu presente y yo solo espero ser parte de tu futuro y probablemente esta reacción (escribir esto o hacer de algo tan insignificante para muchos tan significativo para mi) es uno de los motivos del porqué nunca tuvimos algo más serio que una amistad, pero no quiero hacer de esto un escandalo, de hecho veo muy difícil entrar en tu mundo, porque estoy en Santiago, pero he querido verte hace mucho y cuando dejo de pensar en ello apareces por un pasillo, hermosa como siempre. Ojalá continues como siempre siguiendo tus sueños, haciendo lo imposible para seguir adelante y me encantó verte y abrazarte ayer. Cuidate Mucho

No hay comentarios:

Publicar un comentario